La situación de los jubilados es realmente compleja y requiere un enfoque integral para abordar las necesidades urgentes y asegurar una vida digna para todos.
Las jubilaciones mínimas no alcanzan para cubrir la canasta básica, la dificultad que enfrentan muchos jubilados para satisfacer sus necesidades básicas con los ingresos actuales es un atentado diario a su espíritu y dignidad.
Todos queremos una patria justa y una Argentina en marcha, pero mantener las cuentas en orden no justifica la negligente indiferencia hacia las necesidades de nuestros jubilados.
Es una falta gravísima y una escandalosa injusticia que este reclamo genuino esté desatendido, ya que las necesidades básicas dictaminan los derechos fundamentales de todo ser humano, conforme al derecho natural, la Constitución Nacional y a los acuerdos internacionales sobre los derechos humanos.”
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